La personalidad es el factor que define la conducta de una persona, se rige de acuerdo a los rasgos y características de cada individuo. Determina la forma de ser, actuar, pensar y expresarse, así como la manera en la que se relaciona con los demás, diferenciándola de otra.
En ese contexto, al momento de optar por una carrera profesional, el tipo de personalidad de cada uno, debe jugar un papel fundamental, teniendo en cuenta que de esta elección dependerá el futuro profesional, siendo esa actividad en específica la que realizaremos la mayor parte de nuestras vidas. Para ello, tener claro gustos, intereses y proyecciones a futuro será esencial.
Estudios han revelado que los principales factores que determinan la personalidad son la afectividad, el razonamiento, la estabilidad y la dominancia, a partir de lo cual se construyeron los siguientes prototipos de personalidad:
- Analista, se caracteriza por una curiosidad inagotable, constantemente desea conocer más, analiza todo y se entusiasma con los desafíos intelectuales, se enfoca a crear estrategias y solucionar problemas. Posee habilidades para las matemáticas y para las ciencias exactas, por lo que una carrera en ingeniería o en finanzas podrían ser de su agrado.
- Diplomática, se distinguen por su empatía, constantemente buscan ayudar a otras personas con la finalidad de lograr una mejor calidad de vida para todos. Se caracteriza por su rectitud y por respetar siempre los sentimientos de los demás. Se muestran comprometidos con su entorno, por lo que en gran medida su campo laboral se encuentra enfocado a la interacción social. Posee habilidades para desenvolverse en diferentes espacios, como el campo de la psicología o carreras afines a las ciencias de la comunicación.
- Centinela, este tipo de personas se destaca por su capacidad de discernir entre lo que está bien y mal, poseen una visión de justicia y buscan constantemente colaborar para mejorar la sociedad. Se destacan por respetar las reglas. Suelen abocarse a las áreas del Derecho, Ciencias de la Salud o Contaduría.
- Exploradores son personas enérgicas, extrovertidas y al mismo tiempo sensibles. Se caracterizan por ser seres sociables y con mayor capacidad de adaptación. Estas personas sobresalen por su alto nivel de creatividad e imaginación, tienen ampliamente desarrollada la habilidad visual, por lo que son buenos para la estética, las artes y el diseño.
- Investigadores, cuentan con una curiosidad natural ante las cosas, muestran mayor interés por analizar datos, resolver acertijos, generar conocimientos y encontrar soluciones a problemas de distintas índoles. Prefieren carreras que exigen grandes esfuerzos mentales, y a la vez ejercer cargos donde se requiera pensar e investigar. Las personas con esta personalidad pueden desempeñarse eficazmente en áreas investigativas y de docencia.
- Emprendedor, poseen una denotada visión para iniciar cualquier tipo de negocio, poseen habilidades que los lleva a impulsar exitosos proyectos. También se destacan por contar con destrezas para el liderazgo. Pueden incursionar en carreras como la Administración, Marketing, Comunicación, Relaciones Internacionales, Leyes, Contabilidad.
- Social, se muestran siempre interesados en ayudar para mejorar la calidad de vida de los demás. Les interesa las situaciones donde pueden obtener un aprendizaje, desarrollarse y sobre todo ayudar. Para este tipo de personas las carreras más recomendadas son la Enfermería, Medicina, Pedagogía, Sociología, Antropología y Ciencias Políticas.
Elegir una carrera que se adapte o responda a los intereses personales y profesionales serán de gran ayuda para lograr objetivos y construir un perfil profesional exitoso. La clave está en conocer e identificar el tipo de personalidad que realmente posee cada persona.
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