Al momento de escoger una carrera universitaria, muchas personas evalúan optar por la que cuenta con mayor salida laboral o la que se encuentra en auge, sin embargo, es importante detenerse a pensar que será la actividad que desarrollará la mayor parte de su vida, de ahí radica la necesidad de elegir una profesión que realmente nos guste y apasione.
Se trata de una decisión que compromete el futuro, por lo que es necesario tomarse el tiempo para lograr una decisión acertada. Para ello, se recomienda buscar información respecto a las carreras más rentables, más demandadas y evaluar toda la información hasta identificar cuál de ellas llena nuestras expectativas y sobre todo la que nos apasiona.
Estudiar algo de su agrado le brinda a una persona múltiples beneficios, entre ellos:
- Motivación
- Predisposición continua para el aprendizaje
- Autoestima elevada
- Habilidad para pensar y crear
- Mejor rendimiento
- Intereses permanentes de superación
- Mayor aprovechamiento de las clases y espacios de práctica.
Muchas veces sucede que una persona opta por una carrera de baja demanda en el país que reside, sin embargo, actualmente eso ya no es un impedimento para el desarrollo profesional, debido a las grandes posibilidades que brinda el teletrabajo y la invaluable oportunidad de acceder a otros mercados sin la necesidad de trasladarse.
Desarrollar una verdadera pasión por una carrera, ayuda a una persona a estar en constante búsqueda de todo el aprendizaje que sea posible sobre su profesión, buscará continuamente nuevas metodologías, actualizaciones y nuevos conceptos, acciones que le permitirán ampliar su forma de ver las situaciones que se presentan de acuerdo al ámbito en el que se desenvuelve.
Trabajar en lo que a uno le gusta es una experiencia gratificante para cualquier persona, la misma podrá desarrollar la capacidad de plantear soluciones ante las adversidades que se presenten, buscará innovar constantemente, se trata de un aspecto fundamental para su crecimiento y el cumplimiento de sus logros.
EN